En el imaginario colectivo se tiende a pensar en Manchester como una ciudad más bien sombría y lúgubre; sin embargo, fletar un jet privado para llegar hasta allí resulta ser una opción más que acertada para visitar una de las ciudades de más rápido crecimiento en los últimos años.
Únicamente por detrás de Londres y Birmingham, Manchester ocupa desde hace algún tiempo un lugar predominante en el sector económico, financiero y servicios gracias a los más de 60 bancos de la ciudad; no sólo eso, sino que también florecen y se desarrollan rápidamente varias consultoras británicas y empresas del sector creativo o de los medios de comunicación, como The Guardian o la BBC.
De ello se deduce que Manchester es un lugar donde la gente de negocios va a hacer negocios, y prefiere alquilar un jet privado para asegurarse un viaje cómodo y flexible, impregnado de la dosis justa de privacidad y repleto de servicios exclusivos en el aeropuerto que les permitan optimizar su tiempo al máximo.
Además de todo esto, la ciudad situada en el noroeste de Inglaterra se ha convertido en un punto de referencia para las compras y la cultura con sus innumerables teatros, estadios y museos, así como las tiendas de lujo de las principales calles de la ciudad.
Pero, ¿qué hay de los servicios específicos a los que tienen acceso los pasajeros de vuelos privados, algunos hechos históricos sobre la ciudad y sus atracciones más importantes?
Antecedentes históricos y geográficos de Manchester
Manchester es una ciudad bastante grande situada en el corazón del centro de Inglaterra, a unos 50 km de Liverpool y en el punto exacto donde se une el río Irwell.
En la época romana, Manchester no era más que un pequeño campamento que más tarde se convirtió en una aldea agrícola de importancia muy relativa para el imperio, hasta que los flamencos se apoderaron de ella y la convirtieron en un floreciente centro de transformación de la lana.
Sin embargo, no fue hasta mediados del siglo XVIII cuando Manchester adquirió un papel mucho más importante no sólo en el ámbito inglés, sino también en el internacional, convirtiéndose en una gran ciudad industrial en la que surgieron empresas metalúrgicas, textiles y químicas, gracias a la Revolución del mismo nombre, lo que la convirtió en una auténtica potencia económica.
Entre las décadas de 1980 y 1990, Manchester vivió un periodo de intensa escalada de su fama, tanto en el campo de la música, produciendo artistas que llegarían a convertirse en estrellas del pop de renombre mundial, como en el del deporte, dando a luz a equipos de fútbol que aún hoy son respetados por su gloriosa historia.
Qué ver y hacer en Manchester
Catedral de Manchester
La catedral de Manchester es un imponente edificio religioso dedicado a los santos María, Jorge y Denis; es el lugar de culto anglicano más importante de la ciudad y tiene la arquitectura más distintiva de toda Inglaterra, ya que se construyó íntegramente en estilo gótico.
En su interior se pueden contemplar tallas de madera y objetos perfectamente conservados, así como una de las naves más anchas de todas las iglesias del territorio británico, que conduce desde la entrada hasta el altar.
Cabe mencionar la Piedra del Ángel, una lápida de arenisca que atestigua la antiquísima existencia de una iglesia del año 700 d.C. sobre la que posteriormente se construyó la Catedral.
En el centro histórico de la ciudad inglesa se celebra el evento denominado Art Exhibition: Home, an Exploration of Meaning, un exclusivo salón y galería de arte al que acuden diversas personalidades del mundo del cine, la moda y la crítica de arte para participar en discusiones y debates en las salas VIP habilitadas al efecto.
Barrio de Castlefield
No se puede ir a Manchester sin visitar el pintoresco barrio de Castlefield, el alma misma de la ciudad que sigue siendo testigo de sus orígenes industriales.
Esta zona está formada por una increíble cantidad de canales artificiales que en su día se utilizaron para transportar carbón y diversas mercancías.
Las casas que dan a ella son en su mayoría de ladrillo rojo, mientras que las fábricas abandonadas y los puentes de acero dominan el ambiente de una de las zonas más palpitantes de la ciudad.
A pesar de su carácter rústico, Castlefield cuenta con la presencia de varios clubes exclusivos, como el Lawn Club, un local con terrazas panorámicas donde los VIP pasan horas doradas entre cócteles, aperitivos y privacidad.
Biblioteca John Rylands
Los amantes de la literatura y los libros deberían sin duda visitar la Biblioteca John Rylands, una de las bibliotecas más antiguas de Inglaterra, con un enorme encanto arquitectónico.
Se inauguró a principios del siglo XX y siempre ha estado alojada en un edificio neogótico victoriano que recuerda a una catedral o un castillo.
Los libros que contiene rondan los 250.000, mientras que los manuscritos que alberga rondan el millón: entre ellos se encuentra el Fragmento de San Juan, un fragmento de papiro que incluye el Nuevo Testamento en griego.
Los mejores hoteles de Manchester
Uno de los hoteles más emblemáticos de toda la ciudad es The Midland, una opción de estancia que ofrece a quienes fletan un avión privado a Manchester suites de lujo en un entorno chic.
El hotel es conocido por su elegante arquitectura y su proximidad al centro histórico, lo que permite a los huéspedes visitar la ciudad sin tener que desplazarse lejos.
Un hotel boutique de lujo es el Hotel Gotham, cuyas suites están inspiradas en el Art Decó y ofrecen una serie de servicios exclusivos, como jacuzzi, bañera de hidromasaje y un restaurante gourmet en el patio interior.
También merece la pena mencionar el Hotel Lowry, un alojamiento de 5 estrellas especialmente indicado para los amantes de la modernidad, que ofrece a sus huéspedes un spa y un restaurante con vistas panorámicas sobre Manchester.
Experiencias futbolísticas VIP en Manchester
Los turistas más adinerados pueden acceder a una serie de experiencias únicas en Manchester, como la posibilidad de ver el espectáculo deportivo del derbi futbolístico de la ciudad que enfrenta al City y al United en las Salas VIP y los Palcos Premium de los 2 templos del fútbol de la ciudad, Old Trafford y el estadio Etihad.
Las instalaciones VIP reservadas al público de élite les permiten sentarse en mesas exclusivas tomando cócteles y mordisqueando aperitivos frente al terreno de juego donde los dos equipos de Manchester luchan por el título cruzado; no sólo eso, sino que también es posible visitar las zonas más exclusivas del estadio a través de las numerosas visitas VIP organizadas.
Clima y mejor época para visitar Manchester
Al planificar unas vacaciones basadas en el alquiler de un avión privado a Manchester, es esencial tener en cuenta qué tiempo hace en la ciudad, para elegir el mejor momento posible para visitarla.
En primavera, las temperaturas medias oscilan entre 9°C y 16°C, con días más largos, aunque las lluvias son bastante frecuentes.
En la estación estival, en cambio, se produce un aumento de las temperaturas y una mejora del tiempo, aunque las temperaturas rara vez superan los 30°C; la frecuencia de días secos y soleados aumenta significativamente y, por tanto, la organización de eventos y festivales experimenta un importante repunte.
El otoño en Manchester es bastante suave, pero se vuelve repentinamente frío hacia noviembre; los parques empiezan a llenarse del clásico follaje que cae de los árboles, proporcionando una atmósfera casi mágica.
Los inviernos se caracterizan por temperaturas muy frías, aunque la nieve cae con poca frecuencia; sin embargo, los días son mayoritariamente nublados y ventosos.
En vista de ello, la mejor época para viajar a Manchester es sin duda de mayo a julio, un periodo en el que el tiempo es definitivamente agradable y perfecto para visitar los principales puntos de interés sin demasiada confusión.
Cómo y por qué volar a Manchester en avión privado
El Aeropuerto Internacional de Manchester (código OACI EGCC), inaugurado en 1929 y utilizado a menudo por la RAF (Real Fuerza Aérea) como base aérea durante la Segunda Guerra Mundial, es una de las mejores terminales de Inglaterra en cuanto a tráfico de pasajeros y servicios ofrecidos especialmente a los fletadores de jets privados.
Las 2 pistas dispuestas en paralelo permiten a los aviones chárter de todos los pesos y tipos operar rutas las 24 horas del día.
No sólo eso, la terminal dedicada a la aviación general ofrece a quienes viajan en privado diversos equipos de videoconferencia, servicios de secretaría, catering VIP, estaciones de trabajo con PC, WiFi gratuito, salas de conferencias con capacidad para más de 400 personas, restaurantes y tiendas reservadas, así como una sala VIP que permite a los pasajeros disfrutar de un poco de paz y relajación tras el vuelo.
El centro de Manchester está a unos 15 km del aeropuerto y se puede llegar a él con varios servicios de alquiler de coches, taxis y NCC con conductores de primera clase dispuestos a llevar a los turistas a cualquier parte de la ciudad.
En cualquier caso, conviene reservar el vuelo chárter con suficiente antelación para evitar que se ocupen todas las franjas horarias dedicadas a la llegada y despegue de aviones privados.
Costes de fletar un avión privado a Manchester
Llegar a Manchester en avión privado es extremadamente fácil y cómodo.
Obviamente, la primera conexión que opera el aeropuerto es con Londres, que está a 1 hora y 10 minutos: el coste si coges un Light Jet es de unos 7.000 euros, que se elevan a unos 14.000 euros con un Medium Jet y rozan los 18.000 euros con un Large Jet.
Otra capital europea desde la que llegar a Manchester en avión privado es París, a sólo 580 km, que se recorren en aproximadamente 1 hora y 20 minutos.
En cuanto a los costes, alquilar un Jet Ligero supone un gasto de unos 8.000€, alquilar un Jet Medio asciende a 14.000€, mientras que viajar en un Jet Grande cuesta unos 20.000€.
Además de Londres y París, Manchester también está conectada con Atenas: desde la capital griega, que se encuentra a unas 3 horas y 45 minutos de vuelo, es posible partir con un Light Jet por unos 21.000 euros, incluida una parada para repostar, dada la considerable distancia entre ambos lugares, cifra que se eleva a unos 38.000 euros si se opta por un Medium Jet y a 52.000 euros con un Large Jet.
Una distancia muy similar separa Manchester de la isla griega de Mykonos, desde donde se puede partir hacia la ciudad inglesa con un Jet Ligero cubriendo un gasto de unos 21.000€, unos 40.000€ con un Jet Medio y unos 54.000€ con un Jet Grande.
El vuelo dura unas cuatro horas, dados los aproximadamente 2.500 km en línea recta que separan ambos lugares.
Los mejores aviones para volar en privado a Manchester
Uno de los reactores ligeros con mejores prestaciones en cuanto a velocidad máxima y capacidad es sin duda el Cessna Citation Mustang, una aeronave capaz de superar los 700 km/h y recorrer unos 1.800 km con un solo repostaje.
Dispone de cuatro asientos interiores en una cabina bastante espaciosa para su categoría y perfectamente capaz de poner a los pasajeros a sus anchas.
Entre los Medium Jets, merece una mención especial el Cessna Citation Sovereign+, un avión ideal para recorrer largas distancias a una velocidad de crucero de unos 800 km/h.
Dentro de su gran cabina de 1,70 m de ancho hay 9 asientos, cada uno con su propio espacio para que el pasajero pueda relajarse y disfrutar del vuelo.
Entre los grandes reactores, hay que mencionar el Gulfstream G2, con sus nada menos que 13 plazas, su velocidad máxima que rompe el muro de los 800 km/h y su autonomía máxima de unos 3000 km.
Lo realmente llamativo de este avión es el tamaño de sus espacios interiores: la cabina mide 2,20 m de alto y unos 2 m de ancho, parámetros que permiten deducir fácilmente lo rápido y cómodo que es volar en este reactor.
Los vuelos más frecuentes desde y hacia Manchester
A continuación se indican los enlaces más frecuentes a Manchester: