Tanto si se trata de un viaje de negocios como de unas puras vacaciones, siempre es una buena opción viajar a París alquilando un jet privado y aprovechar la eterna belleza de la capital francesa para visitarla de cerca.
Basta pensar en la Torre Eiffel, los innumerables centros museísticos como el Louvre, el Arco del Triunfo, los Campos Elíseos, donde se pueden hacer compras de lujo, pero también el Sena, perfectamente navegable, que ofrece una original vista de la ciudad francesa, para darse cuenta de lo increíblemente fascinante que es París.
Optar por un jet privado, por tanto, aporta una serie de ventajas exclusivas para el pasajero de un chárter, todas ellas perfectamente capaces de personalizar su experiencia de viaje en función de sus necesidades, sin dejar de garantizar flexibilidad, comodidad, rapidez de respuesta y asistencia detallada.
En diferentes épocas del año, París realza su aura de atractivo acogiendo algunos de los eventos más glamurosos del mundo, como el Abierto de Tenis de Francia, el festival de coches clásicos Retromobile, pero también los numerosos desfiles de Alta Costura en los que las marcas más famosas del mundo presentan sus nuevas colecciones durante la Semana de la Moda de París.
Estos y otros eventos van acompañados de varios servicios privados de traslado que permiten a los pasajeros de los vuelos chárter desplazarse al lugar de celebración de una forma muy exclusiva y rápida.
Pero, ¿cuáles son otras ventajas de fletar un avión privado a París?
¡Examinémoslos en los párrafos siguientes!
Antecedentes históricos y geográficos de París
París está situada en el norte de Francia y está formada por una enorme aglomeración de ciudades y departamentos que rodean y bordean el centro urbano de la capital; los más importantes son Seine-Saint-Denis, Valle del Marne y Hauts-de-Seine. El suelo sobre el que se asienta la capital francesa tiene la particularidad de ser calcáreo, característica que lo ha hecho objeto de varias extracciones de tiza, arcilla y caliza a lo largo de los siglos. Una de las arterias de París es el Sena, río que la atraviesa en su totalidad, creando bucles que aún delimitan algunos de los barrios más conocidos de la capital. La primera población que habitó y colonizó el antiguo asentamiento de París fueron los galos, que se enfrentaron a los romanos dirigidos entonces por Julio César y perdieron inmediatamente el control de la ciudad. Durante la Edad Media, París fue escenario del desarrollo y consolidación de la religión cristiana; además, gracias al rey Clodoveo de los merovingios, la ciudad francesa se convirtió pronto en la capital de Francia, título que impulsó la construcción de edificios históricos en un estilo totalmente inédito para la época, el gótico. A pesar de vivir en una burbuja bastante próspera, París no se libró de las guerras, como la Guerra de los Cien Años entre Francia e Inglaterra o las luchas en nombre de la religión entre católicos y protestantes franceses. En la historia de París, no se puede dejar de mencionar tanto el periodo revolucionario que estalló con el asalto a la Bastilla que condujo a la pena capital de la guillotina decretada contra el rey Luis XVI y su esposa María Antonieta, como el periodo napoleónico durante el cual la ciudad experimentó profundos cambios urbanísticos. Hoy en día, gracias a la modernización y mejora de las arterias de la ciudad, París es una de las ciudades más respetuosas con el medio ambiente de Europa, así como un destino para eventos glamurosos y de alto nivel que atraen a un parterre increíblemente grande de estrellas y personalidades internacionales.
Qué ver y hacer en París
París Alta Costura
Todos los años, en septiembre y octubre, París acoge la llamada Alta Costura, uno de los acontecimientos más glamurosos que organiza anualmente la capital francesa. Se trata básicamente de desfiles de moda en los que participan las marcas de moda más importantes del mundo, desde Chanel a Dior, pasando por Valentino, Calvin Klein, Dolce & Gabbana, Armani y muchas otras casas de estilo que aprovechan el evento para presentar al mundo sus creaciones más recientes. Dada la connotación de lujo que posee la Alta Costura de París, el parterre de estrellas internacionales del mundo de la moda, el cine, el espectáculo y la música que asisten es muy variado, gracias también a los exclusivos servicios VIP de los que pueden disfrutar y que les permiten disfrutar de terrazas panorámicas, salones donde pueden adelantar lo que habrá en la pasarela y traslados desde el aeropuerto hasta el evento.
Retromobile, el salón del automóvil clásico de París
El mes de febrero se caracteriza por el llamado Retromobile, un acontecimiento que se celebra en el recinto ferial de la Puerta de Versalles, donde tiene lugar la edición anual del Salón Internacional del Automóvil Clásico. Los visitantes, en su mayoría VIPs y personalidades de la élite mundial, podrán admirar los más de 500 coches de época que desfilarán por el complejo montado para la ocasión; y no sólo eso, sino que el evento cuenta con una gran afluencia de fabricantes y coleccionistas de todos los rincones del planeta que viajan a París para participar en las distintas subastas y pujar por las piezas de coleccionista más preciadas.
Roland Garros
París se convierte en la capital mundial del deporte durante los meses de mayo y junio gracias a uno de los acontecimientos deportivos más interesantes, Roland Garros. Es un torneo internacional de tenis que se celebra en el complejo de pistas y estadios de las afueras de París, en el que los campeones de la ATP y la WTA compiten por uno de los trofeos más codiciados del circuito mundial. Los numerosos VIP y turistas adinerados que viajan a la capital francesa para asistir a este evento pueden disfrutar de servicios exclusivos dedicados a ellos, como los numerosos restaurantes gourmet situados cerca de las instalaciones deportivas, tribunas VIP desde las que admirar los partidos desde una perspectiva única, así como zonas entre bastidores donde pueden conocer a figuras de la talla de Novak Djokovic, Rafael Nadal y el campeón italiano Jannik Sinner.
Clima y mejor momento para visitar París
El clima de París es continental, con precipitaciones muy frecuentes en invierno y otoño y temperaturas bastante calurosas en verano, debido también a la cantidad de smog que produce la ciudad. La estación primaveral es sin duda la mejor época para fletar un avión privado a París, gracias a los días templados y muy largos en cuanto a horas de luz para pasar en los numerosos parques de la ciudad que se tiñen de una atmósfera mágica que no hay que perderse. El verano parisino es muy bochornoso, con temperaturas que pueden alcanzar los 40°C durante las olas de calor, por lo que los ciudadanos suelen refugiarse en las orillas del Sena para bañarse y refrescarse del abrasador calor estival. En otoño, el clima se enfría debido al descenso gradual de las temperaturas y al viento que empieza a soplar del norte; las precipitaciones, especialmente las fuertes lluvias, aumentan su frecuencia, empapando las calles de la capital y haciendo que las hojas de los árboles se oscurezcan, coloreando la ciudad de un marrón suave increíblemente romántico. El invierno, en cambio, es bastante duro, con temperaturas que a menudo descienden por debajo del punto de congelación y provocan fuertes nevadas, sobre todo durante los meses de enero y febrero.
Cómo y por qué volar a París en avión privado
París es una auténtica metrópolis que ve un increíble tránsito de viajeros a lo largo del año. Como tal, hay tres aeropuertos que prestan servicio a la ciudad, cada uno con su propio tránsito de viajeros y sus propias comodidades en cuanto a servicios ofrecidos; sin embargo, el único centro aeroportuario capaz de gestionar vuelos chárter es el aeropuerto de París Le Bourget (código OACI LFPB). Inaugurado ya al final de la Primera Guerra Mundial, desde principios de los años 80 ha sido objeto de numerosas remodelaciones y mejoras de infraestructura que lo han llevado a convertirse en uno de los aeropuertos privados más grandes y utilizados de toda Europa. Hay nada menos que ocho terminales de aviación general, mientras que las tres pistas permiten que los vuelos privados desde y hacia la capital francesa se gestionen con rapidez y sin problemas. Las pistas están orientadas en distintas direcciones, de modo que es posible despegar o aterrizar en función de las condiciones meteorológicas; además, su longitud y anchura permiten acomodar cualquier avión privado, independientemente de su tamaño o velocidad máxima. Los servicios exclusivos puestos a disposición de los pasajeros privados incluyen una gran Sala VIP, varias salas de conferencias, taquillas para guardar el equipaje, un gran aparcamiento vigilado, varios restaurantes y tiendas, así como el uso de varios hoteles de lujo situados en las inmediaciones del aeropuerto. La distancia que separa el aeropuerto de París Le Bourget del centro de la ciudad es de unos 11 km, que se pueden recorrer gracias a los distintos servicios de alquiler de coches con o sin conductor, así como de limusinas, taxis y traslados en helicóptero gracias a la presencia del helipuerto de París-Issy-les-Molineux, situado en el distrito 11 y conectado directamente con el aeropuerto.
¿Cuánto cuesta volar en avión privado a París?
París está bien comunicada con otra gran capital europea, Londres, de la que la separa aproximadamente 1 hora y 15 minutos de vuelo. El alquiler de un reactor ligero supone un gasto de unos 6.000 euros, cifra que aumenta a unos 14.000 euros si se opta por un reactor mediano, y a unos 19.000 euros si se elige un reactor grande. El tiempo medio de viaje para llegar a París desde Barcelona es de aproximadamente 1 hora y 45 minutos. Se puede hacer utilizando un Light Jet con un coste de unos 9.000 euros, un Medium Jet con un coste de unos 16.000 euros o un Large Jet con un coste de unos 24.000 euros. Entre los trayectos ordinarios está el que une la capital francesa con Berlín, de unas 2 horas de vuelo en total; elegir un Light Jet para hacer ese viaje costará unos 9.000 euros, mientras que optar por un Medium Jet o un Large Jet implica un gasto de unos 17.000 y 25.000 euros respectivamente.
El mejor avión para volar a París
El Cessna Citation CJ3 es uno de los reactores ligeros de mayor rendimiento gracias a su capacidad para volar a una velocidad de hasta 770 km/h recorriendo un máximo de unos 3500 km con un solo depósito de combustible. Los 6 pasajeros transportables pueden disfrutar de un gran confort en la amplísima cabina del avión; hay nada menos que 14 ventanas desde las que admirar la vista desde arriba, mientras que la flamante configuración LED, las mesas plegables que incorpora y los cómodos sofás hacen que el viaje sea sumamente agradable. También hay que mencionar el Hawker 900XP, un reactor medio de largo alcance que aumenta las prestaciones de su predecesor en cuanto a velocidad, altitud de crucero alcanzable y espacio en cabina. Los motores Honeywell con los que está equipado le permiten tener unas increíbles prestaciones de ascenso, además de las diversas características que incorpora su cabina, como asientos reclinables, un amplio maletero, mandos con pantalla táctil e iluminación LCD, que permiten al viajero vivir una experiencia única a bordo de un avión de estas características. Los detalles hacen del Bombardier Global Express un Gran Jet respetable: es un avión que ofrece una asombrosa combinación de velocidad, alcance y autonomía. A bordo pueden viajar hasta 14 pasajeros, mientras que la velocidad máxima alcanzable es de hasta 850 km/h, un parámetro que hace que viajar en un avión de este tipo sea tan rápido como cómodo.
Los vuelos más frecuentes desde y hacia París
A continuación se indican las conexiones más frecuentes con París: